jueves, 15 de octubre de 2009

AHASVERUS



Ahasverus

"El hombre es una sombra que pasa"
David


Los caminos sintieron el instante
en que Ahasverus descolgó sus sandalias
de fuego, y gimieron, borraron las
señales de sus nombres para que los viajeros
no los vieran florecer. Se apartaron del mundo.

Así, mientras las luces y las sombras se amaban libremente,
los deseos furtivos sólo pudieron anidar
en los crepúsculos audaces, en los celajes
cuya frecuente exactitud desataba la
euforia de los días, en la virtual sonrisa
de los rostros perdidos, y en el tiempo
que pasa y no sabe que pasa.

Pero Ahasverus viene, se acerca irreverente. Su paso
redoblante incendia la pradera, abre desdichas en
las paredes de los sueños, satura de
sonidos calcinantes los oídos mortales
y otea como un lince los abismos del alma.

Por ello, para escapar del laberinto, he sembrado en
el viento que se aleja mis esporas
de albatros y he plegado mis alas de ceniza.

Después que haya pasado me sumaré a su sombra
y erraré junto a él, sin deseos, sin esperanza alguna.
Con los pies en el aire, libre al fin, cumpliré sin saberlo
mi destino de larva
de papel
.


Germán Lequerica
Iquitos, Perú 10/09/99



En octubre de 1999, se publica en una edición bilingüe alemán-castellano en Wiesbaden (Alemania) la plaqueta Cantos para el Mendigo y el Rey de la poetisa amazónica Sui-Yun, que incluye el poema “Ahasverus” de Germán Lequerica, que llega a crear una poética filosófica de gran nivel dando la impresión de ser una creación premonitoria sobre el paso de la vida terrenal para convertirse en sombra y recuerdo del pasado.


AHASVERUS
(Versión en Alemán)


,, Der Mensch its ein Schatten, der vorbeigeht”
David

Die Wege spürten den Augenblick
in dem Ahasverus seine Feuersandalen auszog,
und stöhnten, löschten
die Zeichen ihrer Namen, damit die Reisenden
sie nicht blühen sähen. Sie entfernten sich von der Welt.

Während die Lichter und die Schatten sich frei liebten,
konnten somit die flüchtigen Wünsche nur in der
क्ह्नेn Dämmerung nisten, in den Wolkenmassen
deren häufige Genauigkeit
die Euphorie der Tage entfesselte,
in dem stillschweigenden Lächeln
der verlorenen Gesichter, und in der Zeit,
die vergeht und nicht weiβ, daβ sie vergeht.

Aber Ahasverus kommt, er naht rücksichtslos। Sein
Trommelschritt entzündet den Wiesengrundt, verursacht
Unglück in den Wänden der Träume, sättigt
mit dörrenden Lauten die sterblichen Ohren
und belauert wie ein Luchs die Abgründe der Seele.

Daher um dem Labyrinth zu entkommen, habe ich
meine Albatroβsporen in den abrückenden Wind geworfen
und habe meine Aschenflügel gefaltet.

Nachdem es vorüber ist, werde ich mich zu seinem
Schatten schlagen
Und mit ihm umherirren, ohne Wünsche, ohne jede
Hoffnung.
Mit den Füβen in der Luft, endlich frei, werde ich
ohne es zu wissen mein Schicksal einer Papiermaske
erfüllen.

German Lequerica / übersetzt von Curt Meyer-Clason
German Lequerica / Traducción: Curt Meyer-Clason